TIEMPO DEVOCIONAL ENERO 31

“…el evangelio de Dios, que por medio de sus profetas ya había prometido en las sagradas Escrituras. Este evangelio habla de su Hijo, que según la naturaleza humana era descendiente de David, pero que según el Espíritu de santidad fue designado con poder Hijo de Dios por la resurrección. Él es Jesucristo nuestro Señor.” — Romanos 1: 1-4

Como lo indica el verso de apertura, Pablo está citando a Aquél a quien toda la Escritura del Antiguo Testamento hace referencia; el Único quien es tanto humano como divino. Para llevar a cabo el plan de redención y salvación era necesario un ser humano, ya que la naturaleza caída de la humanidad debería estar representada, sin embargo, este ser humano debería estar completamente libre de pecado. Lo anterior hacía indispensable que Dios, hecho hombre, fuera el único substituto posible. Jesús siempre estuvo libre de pecado y durante Su encarnación terrenal fue el único ser tanto divino como humano al mismo tiempo. “Descendiente de David”, hace referencia a la humanidad de Cristo, y “el Hijo de Dios por Su resurrección”, proclama Su divinidad.

La deidad de Cristo, la cual lo hace Dios, y lo ubica al mismo nivel del Padre y del Espíritu Santo, es fundamental para la comprensión del Nuevo Testamento. Tenemos una fe Trinitaria, donde creemos que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son un sólo Dios Verdadero que se ha revelado y manifestado en estas tres personas distintas. Las Escrituras nos dicen que la creación fue originada en Jesús, es decir, Él es la fuente divina y el origen de toda la creación. Igualmente, las Escrituras nos dicen que la creación fue a través de Jesús, es decir, Él es el medio divino a través del cual todo la creación vino a existir, y por último, las escrituras nos dicen que la creación fue para Él, lo que significa que Él es la meta divina y el propósito de toda la creación, es decir toda la creación fue hecha para Él, para que en Él subsistan todas las cosas.

En cuanto a la humanidad de Cristo, Él no apareció en este mundo de una manera espontánea, disfrazado de divinidad, sino que nació como cualquier ser humano real. Jesús tenía nuestras mismas necesidades y fue sometido a las mismas pruebas y tentaciones de cualquier ser humano. Sin embargo, durante Su tiempo de encarnación en esta tierra, Él sabía que sería rechazado y despreciado por Su propio pueblo. Igualmente sabía que durante tres años viviría la vida de un mendigo, y a parte de la ropa que llevaba puesta, nunca poseería nada más. Él sabía que sería traicionado, arrestado, humillado, torturado y condenado a morir de la manera más cruel. Jesús sabía perfectamente que nuestro pecado es lo que nos separa de Dios, y voluntariamente aceptó morir en la cruz y tomar nuestro pecado, una vez y para siempre.

En la declaración de Pablo acerca de la persona y la obra de Jesús dice: “Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que ante el nombre de Jesús se doble toda rodilla en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre” (Filipenses 2:9-11). La Biblia hace referencia a Jesús como el REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES” (Apocalipsis 19:16). Únicamente Jesús es digno, únicamente Jesús salva y todos necesitamos conocerlo.

ORACIÓN: Precioso Señor Jesús, mantenme humilde y con un espíritu rendido permanente delante de Ti. Haz que toda mi vida esté centrada en Ti, y cuida por siempre de mí. Te amo Señor y alabo tu Santo Nombre por siempre. Amén.

PARA REFLEXIONAR: ¿Cuál es el significado para que en mi vida Jesús sea el REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES? ¿Cómo podría explicar esto a los demás?

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PROMESAS DE VICTORIA

Porque Jehová vuestro Dios va con vosotros para pelear por vosotros contra vuestros enemigos, para salvarnos.
Deuteronomio 20:4


Yo os he entregado, como lo había hecho a Moisés, todo lugar que pisare la planta de vuestro pie… Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moises, estare contigo; no te dejare, ni te desampararé.
Josué 1:3,5


Y fueron ayudados contra ellos, y los agarenos y todos los que con ellos estaban se rindieron en sus manos; porque clamaron a Dios en la guerra, y les fue favorable; porque esperaron en él.
1 Crónicas 5:20


Y puso guarnición en Edom, y todos los edomitas fueron siervos de David; porque Jehová daba el triunfo a David donde quiera que iba.
1 Crónicas 18:13


Me diste asimismo el escudo de tu salvación; tu diestra me sustento, y tu benignidad me ha engrandecido. Ensanchaste mis pasos debajo de mí, y mis pies no han resbalado.
Salmo 18:35-36


Danos socorro contra el enemigo, porque vana es la ayuda de los hombres. En Dios haremos proezas, y el hollara a nuestros enemigos.
Salmo 60:11-12


No temas porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudare, siempre te sustentare con la diestra de mi justicia. He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y confundidos; serán como nada y perecerán los que contienden contigo.
Isaías 41:10-11


Porque los que menospreciaron el día de las pequeñeces se alegraran.
Zacarías 4:10 a


Antes en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amo. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principiados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa de creada nos podrá separar de amor de Dios, que es en Cristo Jesus Señor nuestro.
Romanos 8:37-39


Y el Dios de paz aplastara en breve a Satanas bajo vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros.
Romanos 8:37-39


Mas gracia sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro señor Jesucristo.
1 Corintios 15:57


Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesus, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento.
2 Corintios 2:14


Y la mayoría de los hermanos , cobrando animo del Señor con mis prisiones, se atreven mucho mas a hablar la palabra la palabra sin temor.
Filipenses 1:14


Que por fe conquistaron reinos, hicieron justicia, alcanzaron, alcanzaron promesas, taparon bocas de leones, apagaron fuegos impetuosos, evitaron filo de espada, sacaron fuerza de debilidad se hicieron fuertes en batallas pusieron en fuga ejércitos extranjeros.
Hebreos 11:33-34


¿Y quién es aquel que os podrá hacer daño si vosotros seguís el bien? Más también si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no amedrentéis por temor de ellos, ni acostumbréis.
1 Pedro 3:13-14


Más el Dios de toda gracia, que nos llamo a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, el mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.
1 Pedro 5:10


Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del padre, sino del mundo. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
1 Juan 2:16-17


Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo.
1 Juan 4:4


Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe.
1 Juan 5:4


El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borrare su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles… Al que venciere, yo lo hare columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y a mi nombre nuevo… Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono.
Apocalipsis 3:5,12,21


TIEMPO DEVOCIONAL ENERO 30

“En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos.” — Juan 15:8

Gran parte de nuestra vida cristiana está en peligro de convertirse en una cuestión de métodos de aprendizaje, técnicas, procedimientos y programas, los cuales terminan dejando a Dios por fuera. A menudo, las personas son entrenadas para servir a Dios casi de la misma manera como se entrena a una persona para vender un producto. Se les da una serie de argumentos y procedimientos bien ensayados, junto con una poderosa retórica para evitar que los potenciales clientes digan que no, pero todo esto, sin duda, estará desprovisto de cualquier contenido y sentido espiritual verdadero. Si buscamos que nuestra actividad sea fructífera, entonces debemos permitirle a Dios hacer Su obra a través de nuestra dependencia y obediencia a Él.

Jesús dijo: “Permanezcan en mí y yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna rama puede dar fruto por sí misma, sino que tiene que permanecer en la vid, así tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen en mí. Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto; separados de mí no pueden ustedes hacer nada” (Juan 15:4-5). La rama extrae de la vid sustento, vida y fortaleza. Cada fruto que es producido en nosotros y que es duradero, tendrá su origen en la obra de Cristo que se realiza en nosotros y a través de nosotros, y esto ocurrirá en la medida que permanezcamos en Él. Permanecer en Cristo significa vivir cada día en amor, obediencia y dependencia de Él, para que Cristo sea el origen y el poder de todo lo que hagamos.

Jesús también dijo: “De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aún mayores hará, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo” (Juan 14:12-13). Si interpretamos incorrectamente este pasaje, es posible que lo tomemos como un cheque en blanco para cualquier cosa que le pidamos a Jesús. Pero vivir por “fe en Cristo” significa venir en completa sumisión a Su voluntad y agenda, de modo que estemos orientados únicamente hacia Sus planes, ideas y propósitos… y no hacia los nuestros. Entonces la voluntad de Cristo se convertirá en nuestra voluntad, y Dios será el iniciador y la fortaleza de todo lo que hagamos. Es en este contexto que todo lo que pidamos en el nombre de Jesús nos será dado, porque Sus ideas y deseos irán en primer lugar, y lo que nos agrada a nosotros será lo mismo que agrada a Dios.

Si buscamos servir a Cristo, y servirle bien, debemos reconocer la bancarrota de nuestro propio corazón en cuanto a que “separados de Cristo, nada podemos hacer”, y entonces comprenderemos que nuestra suficiencia está únicamente en Cristo. El amor, la dependencia, la obediencia y la humildad son ingredientes esenciales para permitirle al Espíritu Santo obrar libremente en nuestra vida para que llevemos mucho fruto para Cristo.

ORACIÓN: Amado Señor, hazme ese tipo de persona en quien tu Espíritu Santo puede obrar libremente, de manera que yo pueda llevar fruto verdadero para Ti. No hay mayor llamado que permitirle a tu Espíritu Santo producir Su fruto en mí.

PARA REFLEXIONAR: ¿De qué manera puedo permitirle al Espíritu Santo producir Su fruto en mí? ¿Qué significa permanecer en Cristo?

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TIEMPO DEVOCIONAL ENERO 29

Infundiré mi Espíritu en ustedes, y haré que sigan mis preceptos y obedezcan mis leyes.” — Ezequiel 36:27

Después de que Dios diera la ley a Moisés en el Monte Sinaí, una sola palabra puede describir la historia del Antiguo Testamento, y esa palabra es “fracaso”. Los libros históricos registran los detalles de este fracaso. Los libros poéticos lloran y lamentan este fracaso, y los libros proféticos predican acerca de este fracaso. El pueblo hebreo fue incapaz de mantener la ley de Dios. Todos sus intentos terminaron en fracaso.

Entonces Jesús vino a la escena con buenas nuevas, pero, contrariamente a lo que el pueblo esperaba, no vino a anular la ley o a hacerla más fácil en alguna manera. Jesús dijo: “No piensen que he venido a anular la ley o los profetas; no he venido a anularlos sino a darles cumplimiento. Les aseguro que mientras existan el cielo y la tierra, ni una letra ni una tilde de la ley desaparecerán hasta que todo se haya cumplido (Mateo 5:17-18).

La ley es como una linterna. Tú sabes que hay una fuga de agua en el sótano de tu casa, así que tomas la linterna, bajas al sótano, alumbras y descubres el agujero que está causando la fuga de agua. La linterna expone el problema, pero no lo resuelve. De manera similar, la ley expone nuestro problema, pero no puede resolverlo. Fuimos creados a la imagen moral de Dios, la cual se revela por la ley, pero somos totalmente incapaces de cumplirla. El legalismo significa buscar corregir el problema al tratar de cumplir la ley mediante disciplina y esfuerzo humano. La realidad es que no podemos convertirnos a la imagen de Dios mediante imitación sino únicamente por obra del Espíritu Santo. Es decir, Dios mismo, debe ser el origen de Su propia imagen. Sólo Dios puede ser Dios, sólo Cristo puede ser como Cristo.

Hebreos 1:3 dice: “El Hijo es el resplandor de la gloria de Dios, la fiel imagen de lo que él es…” Lo anterior es porque Cristo, es el Único capaz de cumplir la ley al establecer el Nuevo Pacto que dice: “…Pondré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón (Jeremías 31:33). En lugar de que la ley sea externa ubicada en tablas de piedra, ahora la ley será interna, escrita en los corazones y las mentes de aquellos en cuyo interior habita el Señor Jesús. Pablo nos dice: “De hecho, Cristo es el fin de la ley, para que todo el que cree reciba la justicia” (Romanos 10:4). Esto no hace referencia a una imposición externa de la ley, sino a la obra de la vida de Cristo desde nuestro interior. Sólo hay una manera de vivir conforme a la ley moral de Dios, y es por el Espíritu de Cristo quien mora en nosotros, y produce en nosotros y a través de nosotros, el carácter de Dios.

ORACIÓN: Amado Señor, gracias por habitar en mí y cambiar mi vida de manera que cada vez pueda ser una expresión más real de Ti. Deseo que me transformes cada día más conforme a Tu semejanza, Señor. Gracias.


PARA REFLEXIONAR: ¿Cuál es la mejor manera de vivir conforme a la ley moral de Dios? ¿Quién es la única persona capaz de cumplir la ley de Dios? ¿Por qué?



¿Me caso contigo?

por Al Valdés

Muchas personas enfrentan dudas antes de casarse. Por un lado, alguien puede decir que si hay cualquier duda no se debe proceder al altar. También debemos prestar atención a las serias objeciones de nuestros padres, familia, y pastores. Ellos muchas veces ven cosas que nosotros no notamos. Se ha dicho que por eso al chico se le llama el novio porque “no vio”. No obstante, nadie puede decidir por uno. La futura pareja tiene que decidir por sí misma —ante Dios y con Su ayuda. Alguien dijo que nadie debe casarse si no tiene una profunda certeza de que Dios quiere que lo haga. Parte de dicha decisión incluye enfrentar las dudas. Aquí, ofrecemos tres preguntas para ayudarles.

¿Creemos lo mismo?

Algunos piensan que creer lo mismo sólo tiene que ver con las futuras creencias de los hijos cuando lleguen. Sin dudas esto tiene algo que ver con el asunto. No obstante, el efecto inmediato se siente en la misma pareja. La falta de concordancia resulta en compañerismo limitado, valores diferentes, y perspectivas opuestas ante los problemas de la vida. En un contexto más amplio, el apóstol Pablo afirma sin equivocación:

No estéis unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues ¿qué asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas? ¿O qué armonía tiene Cristo con Belial? ¿O qué tiene en común un creyente con un incrédulo? (2 Corintios 6:14-15)

A pesar de esto, tal vez nos sorprendería ver a cuántos jóvenes en nuestras iglesias les importa poco si la pareja que eligen ha creído en Jesús o no. Sólo les importa que “estoy enamorado” o piensan que los solteros en la iglesia ¡merecen seguir solteros! Recordemos que Dios nos ama y desea nuestro bienestar. Él le trajo a Isaac una joven “muy hermosa, virgen, ningún hombre la había conocido” (Génesis 24:16). Por otro lado, David se casó con Abigaíl — después que enviudó de un hombre cuyo nombre significa “insensato” (véase 1Samuel 25). Así que, ¡confíe en Dios! Ahora, hay otra consideración más allá de la creencia en Cristo.

¿Nos reímos de lo mismo?

El poder reírse juntos revela mucho acerca de la compatibilidad de dada pareja. Demuestra que existe la compatibilidad intelectual, dice mucho acerca de los valores que comparten, y contribuye al placer mutuo que una pareja debe disfrutar. A veces escuchamos a alguien que cumple varios años de aniversario de casado, que cuando los felicitamos, responden con algo como, “Tú no sabes nada. ¡Qué aguante!”. Al contrario, aunque toda pareja sentirá momentos de frustración, ésta no debe caracterizar la mayoría de su tiempo juntos. Salomón prescribió lo siguiente:

Goza de la vida con la mujer que amas, todos los días de tu vida fugaz que Él te ha dado bajo el sol, todos los días de tu vanidad, porque esta es tu parte en la vida y en el trabajo con que te afanas bajo el sol. (Eclesiastés 9:9)

El matrimonio debe ser por vida — pero ese tiempo se puede pasar con menos o más agrado interpersonal. Busque alguien con quien pueda disfrutar las bendiciones que Dios les dé en esta vida. Más allá de la compatibilidad social e intelectual, hay una tercera faceta.

¿Sentimos atracción física?

La pareja que entra con planes de cambiar a su futuro esposa o esposo debe dejar esas estrategias a un lado y enfrentar la realidad— hay que aceptar a la persona tal y como es. Usted no es un cirujano plástico (¡o tal vez sí lo sea!). No obstante, su pareja se sentirá rechazada si capta que no hay atracción. Hay algunos “súper espirituales” en la iglesia que nos exhortan a sólo mirar al corazón. (Pero, ¿no serán éstos los mismos que se voltean a ver una nueva persona atractiva que llega a la iglesia?) Cantar de cantares está lleno de alabanza física, por ejemplo:

He aquí que tú eres hermosa, amiga mía;
He aquí eres bella; tus ojos son como palomas.
He aquí que tú eres hermoso, amado mío, y dulce;
Nuestro lecho es de flores. (Cantares 1:15-16)

Sin dudas, el corazón toma la prioridad. Pero a usted le tiene que gustar el aspecto físico de su pareja prospectiva. La pregunta no es si a las amistades les gusta, o si se conforman a alguna norma cultural de belleza, sino si a usted le agrada. Algunas consideran que “el hombre es como el oso, mientras más feo, más hermoso”. Otras tienen normas diferentes. Igual, a algunos chicos les gusta las súper flacas, a otros las más llenitas. A una joven le preguntaron, “¿Piensas que ese chico es bien parecido?” Ella respondió, “No sé, aún no he hablado con él”. Aquí está la sabia combinación. Le daba prioridad a lo interno, pero no desechaba lo externo.

Conclusión

Un profesor de renombre habla de un compañero de estudios que procedía de un país en el cual los padres le escogían la esposa a los hijos. El muchacho nunca ni había conocido ni visto a la chica y se la iban a enviar a los Estados Unidos para que se casaran. Al escuchar esto los amigos se rebelaron reclamando la injusticia de semejantes arreglos —hasta que vieron a la chica. Cuando conocieron a esa joven cristiana, capaz, y atractiva ¡querían que los padres del muchacho también les enviaran novias! Tal vez nuestros padres no hagan lo mismo, pero sí tenemos un Padre que nos ayudará si le pedimos. En el proceso de selección, tres preguntas pueden ayudarnos: ¿Somos ambos creyentes? ¿Compartimos un sentido de humor compatible? ¿Nos gusta mirarnos el uno al otro sin ser distraídos por otros en nuestro alrededor? Una respuesta afirmativa no les garantizará un matrimonio exitoso, pero sí les ayudará a comenzar bien.


Derribando barreras

La reconciliación con Dios comienza de forma individual para cada una de nosotras, pero la agenda de Dios va mucho más allá. Él está creando una nueva humanidad, la cual está unida en Jesucristo y es la razón por la que la iglesia nos lleva a la unidad en Cristo convirtiéndonos en una comunidad de personas que impactan y cambian su mundo alrededor.

“Porque Cristo es nuestra paz: de los dos pueblos ha hecho uno solo, derribando mediante su sacrificio el muro de enemistad que nos separaba…” Efesios 2:14

En la sociedad actual existen diferencias legítimas que se han convertido en divisiones ilegítimas. Existen prejuicios de género, edad, raza, cultura, e incluso habilidades. Ésto crea divisiones, y estas divisiones muchas veces se convierten en divisiones destructivas. Pablo nos dice: “Pues anuló la ley con sus mandamientos y requisitos. Ésto lo hizo para crear en sí mismo de los dos pueblos una nueva humanidad al hacer la paz, para reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo mediante la cruz, por la que dio muerte a la enemistad.” (Efesios 2:15-16). Puesto que esta reconciliación es únicamente posible en Cristo, en la raíz de la división y la fragmentación, subyace un asunto espiritual, el cual sólo puede comenzar a ser rectificado en la cruz de Cristo.

El verdadero ingrediente que nos lleva a la unidad es la presencia de Dios, y primero debemos poner en orden nuestra relación con Él, antes que podamos hacer lo mismo con los demás. Si lo vemos como un triángulo y en el vértice superior, está Dios, y en los vértices opuestos a cada lado; tal vez un judío en un lado y un gentil en el otro, o un esposo en un lado y una esposa en el otro, es en la medida que nos acercamos más a Dios, que terminamos por acercarnos más el uno al otro. Por eso es que Pablo trae todo de vuelta a la cruz de Cristo. Cuando se forman divisiones y emergen barreras, es acerca de propia justicia, pero al venir a la cruz de Cristo, todo es acerca de humildad y unidad en Él.

Vive la Verdad



En Su Dulce Presencia (Canciones de adoración para tu TIEMPO DEVOCIONAL)

ARTE PROFÉTICO Salmo 91


Salmos 91
Reina-Valera 1960 (RVR1960)

Morando bajo la sombra del Omnipotente
1 El que habita al abrigo del Altísimo
    Morará bajo la sombra del Omnipotente.
2 Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío;
Mi Dios, en quien confiaré.
3 El te librará del lazo del cazador,
De la peste destructora.
4 Con sus plumas te cubrirá,
Y debajo de sus alas estarás seguro;
Escudo y adarga es su verdad.
5 No temerás el terror nocturno,
Ni saeta que vuele de día,
6 Ni pestilencia que ande en oscuridad,
Ni mortandad que en medio del día destruya.
7 Caerán a tu lado mil,
Y diez mil a tu diestra;
Mas a ti no llegará.
8 Ciertamente con tus ojos mirarás
Y verás la recompensa de los impíos.
9 Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza,
Al Altísimo por tu habitación,
10 No te sobrevendrá mal,
Ni plaga tocará tu morada.
11 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti,
Que te guarden en todos tus caminos.
12 En las manos te llevarán,
Para que tu pie no tropiece en piedra.
13 Sobre el león y el áspid pisarás;
Hollarás al cachorro del león y al dragón.
14 Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré;
Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre.
15 Me invocará, y yo le responderé;
Con él estaré yo en la angustia;
Lo libraré y le glorificaré.
16 Lo saciaré de larga vida,
Y le mostraré mi salvación.

TIEMPO DEVOCIONAL ENERO 28

“Éste es el pacto que después de aquel tiempo haré con el pueblo de Israel —afirma el SEÑOR —: Pondré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón. Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.” — Jeremías 31:33

Sabemos que nuestro universo está gobernado por leyes de diferentes clases. En matemáticas, dos más dos siempre será cuatro. En química, podemos mezclar dos partes de hidrógeno con una parte de oxígeno y obtendremos agua. Las leyes de la física son totalmente fiables. La gravedad es la fuerza que atrae la materia a la materia y da una sensación de peso, más popularmente conocida como “todo lo que sube debe bajar”. Desde el principio de los tiempos, estas son leyes absolutas y nos permiten entender y predecir el funcionamiento de nuestro universo.

Pero y, ¿qué hay acerca de una ley moral? ¿Existe una ley natural moral que no sea impuesta externamente sino que en realidad sea inherente a todos nosotros y transcienda el tiempo y la cultura? Pablo nos dice, “Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos, mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiendo sus razonamientos” (Romanos 2:14-15)

¿Era simple coincidencia que los gentiles hicieran las cosas requeridas por la ley de Dios aunque ellos todavía no tuvieran conocimiento de la ley? Pablo está diciendo que no es coincidencia, sino que es porque los requerimientos de la ley en realidad están escritos en sus corazones. Es decir, las personas tienen un sentido natural innato del bien y del mal. Dios dio al pueblo judío la ley por escrito, pero también la ha puesto en el corazón de los gentiles. Puesto que existe una ley moral natural que no es arbitrariamente impuesta sino que es universal a toda la raza humana, también existen implicaciones inherentes a eso. Aunque podemos sentirnos libres de quebrantar o cambiar las leyes, la realidad es que si las rompemos, con el transcurso del tiempo, ellas nos romperán a nosotros. La violación de la ley moral de Dios es tan destructiva como ignorar las leyes físicas de Dios.

La ley moral absoluta del universo está determinada por el carácter de Dios, la cual Él reveló en los Diez Mandamientos. En el mundo de hoy, los Diez Mandamientos parecen anticuados, restrictivos, irrazonables e incluso irrelevantes para muchas personas, pero debemos reconocer que se derivan del carácter inmutable de Dios. Tal vez porque son humanamente imposibles de cumplir, los Diez Mandamientos, son percibidos con tal escepticismo y negatividad, pero ese es exactamente el punto central, su cumplimiento. Las leyes de Dios son imposibles de cumplir para un pueblo caído, pero no para Dios, ya que son Su naturaleza. Es por eso que el objetivo del Evangelio es restaurar el carácter moral de Dios y así restaurar los comportamientos y actitudes que reflejen la imagen moral de Dios en nuestra experiencia.

ORACIÓN: Amado Padre Celestial, gracias por los Diez Mandamientos y por el código moral que ellos representan al estar escritos en nuestro corazón. Ayúdame a tener plena consciencia de ellos y a reflejar Tu carácter moral. Gracias Señor.

PARA REFLEXIONAR: ¿Existe una ley natural que sea inherente a todos nosotros y transcienda el tiempo y la cultura? ¿Por qué razón Dios dio los Diez Mandamientos? ¿Cómo podría explicar la relevancia de los Diez Mandamientos en el mundo de hoy?

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Mi Niña Amada

TIEMPO DEVOCIONAL ENERO 27

Pero cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.” — Hechos 1:8

Uno de los mayores gozos y privilegios disponibles para cada uno de nosotros es poder experimentar la obra de Dios a través de nuestra vida, y así convertirnos en bendición para el mundo en general. Dar testimonio de Cristo no es algo que únicamente hagamos cuando las oportunidades aparezcan, sino que significa vivir una vida completamente disponible para Jesús y Sus propósitos.

Una vez que el Espíritu de Cristo habita en nosotros, dar testimonio de Él no es opcional. Cuando aparezca la oportunidad debemos siempre recordar que Jesús dijo “ustedes serán mis testigos”. La opción es si estoy preparado para ser un buen testigo o un mal testigo, un testigo verdadero o un testigo falso, pero la realidad es que una vez aceptamos a Cristo, ya somos testigos de Él. Antes de mi boda tenía la opción de aceptar ser esposo o no serlo. Una vez que acepté ser esposo, la única opción abierta para mí se redujo a ser un buen esposo o un mal esposo, pero la realidad es que ya era esposo.

La palabra griega para testigo es la palabra “martus”, de donde se deriva la palabra “mártir”. La muerte no hace mártires; únicamente los revela. Un verdadero testigo de Cristo muere a sí mismo para que la vida de Cristo que mora en él pueda ser expresada. En 2 Corintios 5:15 Pablo escribe: “Y él murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí, sino para el que murió por ellos y fue resucitado.” Nuestro “viejo yo” ha sido juntamente crucificado con Cristo, y ahora vivimos en la fortaleza de la vida de Cristo, permitiéndole cumplir Sus propósitos y objetivos a través de nosotros. Esto es lo que significa ser un testigo de Cristo.

La manera como vivimos expresa la clase de testigos de Cristo que somos. Pablo dice: “…Por lo tanto, gustosamente haré más bien alarde de mis debilidades, para que permanezca sobre mí el poder de Cristo” (2 Corintios 12:9). Vivir con ese tipo de convicción es experimentar la obra de Dios en nuestra vida. Es por esto que no debemos tener miedo si Dios nos llama desde el abismo más profundo de nuestra vida. Cuando estamos en lo más profundo de nuestra desesperación y carentes de nuestros propios recursos, descubriremos al Espíritu Santo de Dios vivo y activo dentro de nosotros.

Dios no da órdenes frías para que personas débiles las implementen en sus propias fuerzas, sino que Él nos da su Santo Espíritu como medio para lograrlas. Obrar en y a través de las personas es la estrategia de Dios en este mundo. No hay ningún plan B, lo que descubriremos es que en nuestra obediencia a Dios y nuestra dependencia de Él, el Espíritu Santo obrará de manera poderosa. Es por eso que nunca debemos separar el poder del Espíritu Santo en nosotros del Señorío de Cristo en nosotros.

ORACIÓN: Amado Señor Jesús, ayúdame a ser un verdadero testigo Tuyo, y ayúdame a apartarme de todo lo que no dé buen testimonio de Ti. Gracias Señor.

PARA REFLEXIONAR: ¿Cómo puedo saber si estoy siendo un verdadero testigo de Cristo? ¿Cuándo fue la última vez que di testimonio de Cristo?

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ENAMÓRATE DE...





Café para Princesas: Tengo algo que contarte...

Café para Princesas: Tengo algo que contarte...: Hola princesa, me acompañas con una taza de café. Tengo algo que contarte... Sabes? una gran tormenta de sentimientos intentó hundirme; mi...

TIEMPO DEVOCIONAL ENERO 26

“Jesús les dijo: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.” — Juan 4:34

¿Cuál es la voluntad de Dios para mi vida? Esa es una pregunta muy común entre la mayoría personas, sin embargo es una pregunta defectuosa y errada ya que conduce a una respuesta incorrecta y deficiente. Esta pregunta es defectuosa porque el enfoque está en el lugar equivocado. El enfoque es acerca de mí, de mi vida y mi futuro, en otras palabras, yo soy el punto central. Por supuesto que esta es una preocupación legítima, pero la verdadera pregunta debe ser, ¿Cuál es la voluntad de Dios?...punto. En esta última pregunta, el enfoque está en Dios, en Su intereses, en Su agenda, en Su voluntad y en Su propósito, el cual está en una escala mucho mayor de lo que nosotros podemos percibir. 

La voluntad personal de Dios para nuestra vida sólo puede ser encontrada dentro del contexto de Su voluntad general para todas las personas. Para ilustrar lo anterior diré lo siguiente: cuando alguien inicia un nuevo trabajo en una empresa, para que la descripción de su nuevo puesto de trabajo tenga algún sentido, primero es necesario responder algunos interrogantes generales como: ¿A qué se dedica esta empresa?, ¿Cuáles son sus objetivos? ¿Cómo funciona? Será únicamente dentro de este contexto general de la empresa, que la descripción del nuevo puesto de trabajo tendrá significado para nosotros.

Para conocer la voluntad personal de Dios, primero debemos entender la voluntad general de Dios para todas las personas. Debemos entender que Dios obra en la Tierra a través de Su pueblo y tenemos el privilegio de desempeñar un papel específico en Su obra, pero es un papel dentro del contexto del panorama completo de Dios. Nuestra vida personal debe alinearse con lo que Dios está haciendo en el mundo. Esto incluirá un vistazo hacia arriba al señorío de Cristo en cuanto a buscar y salvar al perdido, y una mirada hacia afuera a las personas que están siendo traídas a nuestra vida, en cuyo corazón Dios está obrando y dándonos el privilegio de participar.

El contexto en el cual Jesús les dijo a Sus discípulos “mi alimento es hacer la voluntad del que me envió y terminar Su obra”, fue cuando Sus discípulos habían ido a Samaria a comprar comida, lo cual es una función humana legítima. Ellos simplemente habían lanzado una mirada superficial e indiferente a una mujer que caminaba sola en medio del calor del día para sacar agua, ellos habían perdido completamente la oportunidad de cosechar un alma. Jesús más tarde los reprendió por perder la cosecha que Él mismo les había enviado para cosechar. 

¿Por qué los discípulos fallaron en encontrar esta alma que buscaba a Cristo? Ellos estaban más preocupados con sus propias necesidades que con la obra de Dios y fallaron en reconocer que alguien podía estar listo para la Palabra de Dios. Nunca debemos desconectar la voluntad de Dios para nosotros de la voluntad de Dios a través de nosotros, porque somos el medio que Él usa para llegar a otros con palabras de vida. Nuestra sensibilidad y obediencia a los propósitos generales de Dios, asegurarán el cumplimiento de Su guía personal en cada área de nuestra vida.

ORACIÓN: Amado Padre Celestial, ayúdame a permanecer siempre consciente que Tu voluntad y propósito son la prioridad de mi vida. Permíteme estar siempre disponible para Ti y abre los ojos de mi entendimiento. Gracias Señor.

PARA REFLEXIONAR: ¿Cuál es la voluntad general de Dios para las personas? ¿Cómo puedo encontrar la voluntad especifica de Dios para mi vida?

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Hoy Dios Te Dice

TIEMPO DEVOCIONAL ENERO 25

“Al oír aquel bullicio, se agolparon y quedaron todos pasmados porque cada uno los escuchaba hablar en su propio idioma. — Hechos 2:6

Lo que inicialmente cautivó la atención de las personas en el Día de Pentecostés, fue el hecho que varios de los presentes hablaran en diferentes lenguas. Las Escrituras nos dicen que judíos de 17 diferentes nacionalidades se habían reunido en una gran multitud, y estaban desconcertados y absolutamente maravillados con lo que estaba sucediendo. Dios había cautivado la atención de ellos, pero ellos no sabían que se trataba de Dios, ni tenían idea de lo que estaba sucediendo hasta que Pedro junto con los otros apóstoles se puso en pie, y predicó el primer sermón después de Cristo, el cual marcó el nacimiento de la Iglesia en Jerusalén.

Pedro comienza por explicar que aquellos que estaban hablando en lenguas no estaban borrachos, como muchos inicialmente suponían, y continúa explicando que lo que estaba ocurriendo era algo que el profeta Joel había profetizado varios siglos atrás. Eso dirige la atención de ellos hacia Dios. Pedro concluye: “Sepa, pues, ciertísimamente toda la casa de Israel, que a este Jesús a quien vosotros crucificasteis, Dios le ha hecho Señor y Cristo.(Hechos 2:36). El pueblo creyó y fueron atraídos hacia Dios.

Este es un momento importante que debe ser reconocido. Cuando Dios está obrando a través de Su pueblo, dirige la atención hacia Sí mismo. Un don espiritual es la manifestación de que Dios está obrando en nosotros y a través de nosotros para revelarse a los demás. El don de lenguas no fue una especie de fuegos artificiales para el lanzamiento de la Iglesia. ¡Espectacular, maravilloso! ¡Estoy impresionado! El propósito de Dios con los dones espirituales es hacer una declaración de las maravillas que Él hará para demostrar a los demás lo que hará por ellos.

La primera respuesta en el día de Pentecostés fue que las personas quedaron maravilladas y asombradas—no esperaban esto; estaban perplejas—no podían explicarlo y había quienes criticaban lo que estaba ocurriendo—no les gustaba. Las dos son respuestas comunes al Evangelio, pero todo esto abrió una puerta para que Pedro se levantara y diera una explicación. Entonces Dios hizo una obra en el corazón de las personas. Hechos 2:37 dice: “Cuando oyeron esto, todos se sintieron profundamente conmovidos y les dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: —Hermanos, ¿qué debemos hacer?”

La predicación efectiva y eficaz explica las cosas de manera que las personas puedan relacionar lo escuchado con algo previamente conocido, algo que ellos hayan visto y experimentado, porque eso es lo que conmueve y quebranta el corazón humano. Nos vemos genuinamente a nosotros mismos por lo que somos, y cuando escuchamos la predicación del Evangelio, nuestro enfoque es dirigido hacia Dios. Es por eso que en el Día de Pentecostés hubo 3,000 conversos, todos ellos en el mismo día y lugar. En pocos días ya había 5,000 y el Señor continuaba añadiendo más creyentes a la iglesia. ¿Por qué hubo tan gran afluencia de creyentes? El corazón de los presentes fue conmovido y todos fueron atraídos hacia Dios. Ellos pudieron comprender que Dios estaba haciendo algo.

ORACIÓN: Amado Señor, te pido por una obra profunda de tu Espíritu en mí para que yo pueda ser una medio de atraer la atención de las personas hacia Ti. Gracias Señor.

PARA REFLEXIONAR: ¿Estoy dirigiendo la atención de las personas hacia Cristo? ¿Cuál es mi reacción cuando veo que Dios está obrando de manera sobrenatural en la vida de las personas?

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Escucha esto y "Recibe tu milagro"

¿Por qué tener un TIEMPO DEVOCIONAL?

"Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas,
    Así clama por ti, oh Dios, el alma mía.
Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo;
¿Cuándo vendré, y me presentaré delante de Dios?"
Salmo 42:1-2

La Real Academia Española, define la palabra ‘devoción’ como la “Prontitud con que se está dispuesto a dar culto a Dios y hacer su santa voluntad. Una costumbre buena, una práctica piadosa no obligatoria” Algunos estudiosos del Cristianismo, definen un Devocional, como un tiempo de devoción para buscar a Dios en la lectura, meditación de la Biblia y la Oración. 

TIEMPO DEVOCIONAL  

Es un tiempo de estudio de las Sagradas Escrituras, la Biblia. 

Tiempo de oración, lectura de la Palabra de Dios y Meditación.


EL PROPÓSITO DE ESTE TIEMPO DEVOCIONAL ES:

Fortalecer los lazos entre Dios y yo.
Conocerle mejor, en su carácter plasmado en la Palabra.
Meditar en la Palabra, encontrar interpretación y dirección.
Recibir dirección del Espíritu Santo para el diario  vivir.
Aplicar el conocimiento adquirido en ese momento.
Crecer espiritualmente, adquiriendo nuevos conocimientos cada día.
El TIEMPO DEVOCIONAL puede realizarse de manera  individual o en grupo, hablado o en silencio.

JESÚS tenía un TIEMPO DEVOCIONAL

¿COMO ERAN LOS DEVOCIONALES DE JESÚS?

Muy Temprano (siendo aun oscuro) Mr. 1.35
Y al acabar el día (al despedir a su gente) Mr. 6.46
En un lugar apartado (desierto)
En soledad (Lc 5.15)
A veces acompañado de algunos
A veces toda la noche (Lc. 6.12)

ALGUNOS BENEFICIOS DE TENER UN TIEMPO DEVOCIONAL

1.- Nos ayuda a ganar la batalla contra la carne.
2.- Nos ayuda a no perder el sentido de lo espiritual
3.- Nos ayuda a cumplir la voluntad de Dios en la tierra
4.- Nos ayuda a mantanernos enfocados en las cosas de arriba.
5.- Nos prepara para las pruebas.
6.- Nos enseña a depender de Dios.
7.- Nos nutre espiritualmente.
8.- Nos fortalece en la fe.

¿Si Jesús tenía un TIEMPO DEVOCIONAL por qué tu no?

¡Créeme!

 Dios tiene el control de tu vida y está preparando cosas que ojo no ha visto, ningún oído ha escuchado. Sus pensamientos para tu futuro son de bien y no de mal, para darte esperanza y alegría.
Así que, deja de preocuparte tanto y toma posesión de lo sobrenatural de Dios transformando tus oraciones en realidad.


Mi confianza está en Jehová (Serie Promesas)

¿Hay Pan en la Casa del Pan?

Pastor Carlos Camacho

Iglesia Nuevo Testamento de Ponce


¿Se ha perdido la prioridad de la Presencia de Dios en la Iglesia moderna?


¿Nos damos cuenta cuando el Señor está en la ciudad, o somos como los fariseos en el Templo el día de Su entrada triunfal a Jerusalén? Ellos estaban muy ocupados en su Templo vacío, donde la presencia de Dios hacía siglos que había escapado; orando y clamando por la venida de su Mesías. Pero, ¡no pudieron darse cuenta que el Mesías mismo estaba entrando en la ciudad!


Su Presencia pasó de largo y ellos no pudieron recibirla. ¡Perdieron la hora de su visitación! Porque el Ungido llegó de manera inesperada.


Cuando Dios viene realmente a nuestra vida, rompe todos los moldes que hemos construido y crea moldes (odres - receptáculos) nuevos. Cuando Dios se nos presenta, nos sorprende porque viene en una manera que no Le esperamos. Por esa razón, muchas veces no Le podemos reconocer.


Tenemos que darnos cuenta que nuestros moldes – programas, campañas, conciertos, estructuras – no significan nada. Es Su Presencia lo que necesitamos, y solamente Su Presencia, sin importar lo que cueste ni cómo llegue.


¡LO NECESITAMOS A ÉL!


El pan escasea en tiempos de hambre espiritual como la que vivimos en nuestros días. En el mundo no falta el hambre, sino el PAN. Hay multitudes hambrientas por todas partes buscando satisfacer su hambre espiritual con astrología, esoterismo, hechicería y cosas similares a esas. Gastan millones de dólares al año en consultar adivinos y agoreros tratando de remediar su escasez de alimento espiritual.


En la Biblia encontramos un tiempo similar al presente, en el cual también ESCASEABA EL PAN.


Rut 1:1-6 NVI

1 En el tiempo en que los caudillos (jueces) gobernaban el país, hubo allí una época de hambre. Entonces un hombre de Belén de Judá emigró a la tierra de Moab, junto con su esposa y sus dos hijos. 2 El hombre se llamaba Elimélec, su esposa se llamaba Noemí y sus dos hijos, Majlón y Quilión, todos ellos efrateos, de Belén de Judá. Cuando llegaron a la tierra de Moab, se quedaron a vivir allí. 3 Pero murió Elimélec, esposo de Noemí, y ella se quedó sola con sus dos hijos. 4 Éstos se casaron con mujeres moabitas, la una llamada Orfa y la otra Rut. Después de haber vivido allí unos diez años, 5 murieron también Majlón y Quilión, y Noemí se quedó viuda y sin hijos. 6 Noemí regresó de la tierra de Moab con sus dos nueras, porque allí se enteró de que el Señor había acudido en ayuda de su pueblo al proveerle de alimento.

Cuando escasea el pan, las personas abandonan la Casa del Pan (Belén) y escapan a un lugar que les pueda ofrecer lo que necesitan, aun cuando ese lugar sea peligroso y dañino para ellos. Moab en hebreo es "de su padre", ya que Moab nació del incesto de Lot (el sobrino de Abraham) con su hija mayor después que salieron de Sodoma. Más tarde, aconsejados por Balaam, los moabitas sedujeron a los israelitas a participar de la sexualidad y la idolatría.


Ahí se dirigió Elimélec con su familia, en busca de pan, sin saber que hallaría allí perdición y malos tiempos. Murieron él y sus dos hijos y dejó una viuda desamparada con sus dos nueras, una de las cuales se negó a seguirle a la Casa del Pan porque no podía creer que otra vez había pan en la Casa del Pan.


Así también sucede hoy con los que se van de la Casa del Pan (Belén) para saciar el hambre en medio de un pueblo idólatra y alejado de Dios. El HAMBRE está patente en sus vidas, pero buscan saciarla en el lugar incorrecto, porque NO HAY PAN EN LA CASA DEL PAN.


Muchos de ellos se han ido de la Casa del Pan porque llegaron con la esperanza de encontrar el pan deseado de la Presencia de Dios, pero solo encontraron migajas de glorias pasadas y una alacena espiritual vacía.


Hablamos mucho de lo que Dios ha hecho y por dónde Dios ha pasado, pero no tenemos mucho que decir de lo que Dios está haciendo ahora. Quizá reclamamos ríos de la Presencia De Dios, cuando en realidad solo hemos experimentado destellos de Su gloria.


Las personas vienen y no pueden sentir una presencia viva del DIOS TODOPODEROSO moviéndose en la iglesia.


¡Si tan solo pudiéramos tener la experiencia viva de Isaías cuando encontró el Templo lleno de la gloria de Dios!


Isaías 6:1-8 RV60

… vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y sus faldas llenaban el templo… Y los quiciales de las puertas se estremecieron… y la casa se llenó de humo. Entonces dije: ¡AY DE MÍ! que soy muerto; porque… han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.

¡Si tan sólo pudiéramos exclamar como Isaías – AY DE MÍ, que soy muerto – por estar en la Presencia del Dios vivo.


¡Si tan solo pudiéramos experimentar el instante en la inauguración del Templo, en que la Presencia de Dios obligó a los sacerdotes a quedarse fuera del templo porque la presencia de Dios lo llenó todo!


2 Crónicas 7:1-3 NVI

1 … descendió fuego del cielo y consumió el holocausto y los sacrificios, y la gloria del Señor llenó el templo. 2 Tan lleno de su gloria estaba el templo, que los sacerdotes no podían entrar en él.


Cuando viene la presencia de Dios a nuestras vidas, tenemos que dejar todo en suspenso para solamente atenderle a Él. No podemos estar como Marta, tan atareada en los quehaceres de la cocina (quizá preparando un exquisito manjar para Su Señor), mientras María estaba en el lugar apropiado – ¡EN LA MISMA PRESENCIA DEL DIOS VIVO!


Ya no cuentan nuestros PLANES ni nuestros PROGRAMAS; solo podemos movernos dentro de la Perfecta Voluntad de un Dios Perfecto, que nos busca y nos atrapa, porque nosotros no podemos hacer nada para atraparle a Él.


Cuando permitimos que nuestros corazones sean transformados por la obra del Espíritu Santo en medio nuestro, conquistamos el corazón de dios. De la misma manera que David fue un hombre con un corazón conforme al de Dios, nosotros también podemos serlo, siempre y cuando tengamos hambre genuina de Su Presencia.


Si le damos a las personas un poquito de Dios mezclado con mucho de otras cosas, es como si las vacunáramos. Se sienten “inoculadas” y no pueden experimentar una presencia real y sostenida de Dios en sus vidas. Debemos contaminarles, no inocularles.


Pero si llenamos de Pan la Casa del Pan, siempre llega la NOTICIA, sin importar cuán lejos estén las personas de la Casa del Pan. Noemí escuchó en MOAB que había vuelto el pan a la Casa del Pan (Belén) y enseguida se dirigió allá. No solamente fue ella, sino que llevó a su nuera Rut, que se convertiría más tarde en la bisabuela del Rey David y antecesora del mismo Jesús.


Cuando vuelve el Pan a la Casa del Pan todos pueden oler su aroma. Del mismo modo que las personas suelen arremolinarse alrededor de una panadería temprano en la madrugada cuando el pan fresco y caliente sale del horno, así mismo llegarán los hambrientos a la Casa del Pan al percibir el aroma de pan fresco, recién horneado.


Es un aroma que abre nuestro apetito y eso mismo es lo que tenemos que tener por Dios – apetito de Su Presencia. En seguida se regará la voz y vendrán corriendo los hambrientos a la Casa del Pan. No tendremos que colocar anuncios en el periódico, la radio o la televisión. No tendremos que contratar un publicista profesional para que informe a la gente lo que está pasando.


El mejor publicista de todos – el Espíritu Santo – se encargará de hacer correr la voz y atraer a las personas. Los hambrientos escucharán Su llamado (aunque no lo comprendan) y correrán diciendo: “Es verdad, hay pan nuevo en la Casa del Pan”. Desde Moab vendrán, desde todos los rincones de la ciudad, solamente cuando haya un horneado nuevo de pan en la Casa.


Volverán también los que se fueron – y no volverán solos. Como Noemí, traerán a su Rut con ellos.


Estamos viviendo una hora especialmente diseñada para la Iglesia. Es el momento crucial de dar de comer pan a los hambrientos. Aquellos que están buscando el alimento espiritual en los lugares equivocados – en las barras, en las reuniones de espiritismo, en la búsqueda de filosofías huecas que promulgan una paz ficticia que resulta ser un engaño. Solo en la Presencia de Dios podemos tener SU PAZ – aquella que sobrepasa todo entendimiento.


Si la iglesia llega a convertirse en lo que puede y debe ser, tendremos problemas para manejar las multitudes que llegarán movidos por el hambre de la Presencia de Dios.


Tenemos que preguntarnos hoy: ¿HAY PAN EN LA CASA DEL PAN? ¿O ESTAMOS PASANDO TIEMPOS DE SEQUÍA Y ESCASEZ ESPIRITUAL EN NUESTRA RELACIÓN CON DIOS?


Podrán decir los inconversos como Rut a Noemí: “Si es verdad que hay pan de nuevo en la Casa del Pan, yo voy contigo, tu pueblo será mi pueblo y TU DIOS SERÁ MI DIOS”.


Tenemos que ser inconformes con lo que hemos podido lograr hasta ahora en nuestro camino. Han sido solamente migajas, en comparación con el alimento que Dios nos quiere dar. Tenemos que anhelar profundamente a Dios y recibir nuestra ración completa de pan.


Para eso, tenemos que abandonar nuestro lugar de confort, nuestro lugar de acomodo, nuestra posición “segura” y atrevernos a creerle a Dios en un acto supremo de fe.


No importa cómo, cuándo o en qué manera Dios se acerque a nosotros. No importa que se nos corra el maquillaje. No importa que caigamos de rodillas o postrados delante de la Majestad de Su Presencia Divina. No importa que nos vean los demás y que piensen lo que piensen de nosotros. ¡LA ÚNICA OPINIÓN QUE VALE ES LA DE DIOS!


Puede que estés cansado del camino, estropeado por las batallas, delirando por comer un bocado de maná del cielo; pero hay buenas noticias – le servimos a un Dios Todopoderoso que vendrá a saciarnos. Nuestro tronco florecerá y HABRÁ PAN EN LA CASA DEL PAN.


Job 14:7-9 NVI

7 Si a un árbol se le derriba, queda al menos la esperanza de que retoñe y de que no se marchiten sus renuevos. 8 Tal vez sus raíces envejezcan en la tierra y su tronco muera en su terreno, 9 pero al sentir el agua, florecerá; echará ramas COMO ÁRBOL RECIÉN PLANTADO.

Es Jesús, el PAN DE VIDA, el MANÁ PROMETIDO, Quien nos SACIARÁ.


Juan 5:25 NVI

Ciertamente les aseguro que ya viene la hora, y ha llegado ya, en que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y LOS QUE LA OIGAN VIVIRÁN.

Y recordemos siempre la advertencia que Pablo les dio a los tesalonicenses: ¡NO APAGUEN EL ESPÍRITU!




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