✽ Serie ¡NO TEMAS! ✽Día 3

¡Bendiciones amada princesa!.

Princesa, el temor no viene de Dios. El Señor 

anhela vernos vivir y caminar en fe, confiadas en Él, 

libres de miedos y ataduras. 

El temor es una trampa, un arma que usa el 

enemigo para desviarnos del plan del Padre 

para nuestras vidas.

La Palabra nos dice en Proverbios 29:25 “Temer 

a los hombres resulta una trampa, pero el que 

confía en el SEÑOR sale bien librado.”

¿Eres de las que creen o de las que tienen temor? 

Hay que luchar, hay que vencer el temor. 

¡El tiempo llegó!

Vamos a levantarnos en fe y derrotar todo aquello 

que a menudo nos vence. Esos temores que quieren 

socavar nuestra fe y aniquilar nuestras esperanzas. 

Esos temores que quieren frenar el cumplimiento de 

nuestro propósito.

¡Vamos a vencer! 

Teniendo presente una verdad irrefutable:

Nuestro enemigo no tiene mayor autoridad que Jesús. 

Jesús es el Rey de reyes, Creador y Salvador del mundo.

Él es el Todopoderoso, El Señor de señores. 

Satanás no es más que un ser creado, limitado y 

derrotado en la cruz del calvario. 

Jesús les dijo a sus discípulos en diferentes ocasiones: 

NO TENGAN TEMOR. 

Eso no es lo que Dios quiere para nuestras vidas, 

porque el temor te ata, te frena, te paraliza, e impide 

tu avanzar en fe hacia la meta.

Jesús dijo que estaría con nosotros hasta el fin. 

Una declaración que nos garantiza Su presencia, 

por medio de Su Espíritu Santo, Su respaldo, Su defensa, 

y nos garantiza la victoria de ante mano en cada batalla. 

Una victoria por medio de la fe, no del temor.

Princesa, queda de nuestra parte levantarnos en fe 

y enfrentar esos temores, si no los vencemos, 

esos temores nos atraparán.

Declara la Palabra y proclama el Señorío de Jesucristo

sobre tu vida. Declara la victoria sobre el enemigo. 

¡Somos más que vencedoras! 

"Antes, en todas estas cosas somos más que 

vencedores por medio de aquel que nos amó.

Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, 

ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, 

ni lo presente, ni lo por venir,

ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa 

creada nos podrá separar del amor de Dios, 

que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

Romanos 8:37-39

Soy una Princesa Guerrera

♔ Diana J. Hernández J.♔